Contratistas, cambios tecnológicos y organizacionales en el agro argentino

Hasta no hace muchos años, en Argentina, la tenencia de la tierra era casi una condición suficiente para la producción agrícola. En los últimos años, el crecimiento en las cantidades obtenidas de granos, se ha dado en el contexto de una nueva forma de organización, donde son muy importantes otros fa...

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Detalles Bibliográficos
Autor principal: Lódola, Agustín
Otros Autores: NU. CEPAL
Formato: Texto
Lenguaje:Spanish / Castilian
Publicado: CEPAL 2014
Materias:
Acceso en línea:http://hdl.handle.net/11362/36772
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Descripción
Sumario:Hasta no hace muchos años, en Argentina, la tenencia de la tierra era casi una condición suficiente para la producción agrícola. En los últimos años, el crecimiento en las cantidades obtenidas de granos, se ha dado en el contexto de una nueva forma de organización, donde son muy importantes otros factores productivos (capital –maquinarias-, capacidad empresarial), nuevos insumos (semillas transgénicas, nuevos agroquímicos y fertilizantes) y donde la tecnología que ambos tienen incorporada se potencia en agentes que acumularon un importante stock de conocimiento tácito. Más que por quién usa la tierra, el eje pasa por cómo la misma se utiliza. Los cambios tecnológicos y organizacionales tienen mucho que ver en la expansión agrícola argentina de las últimas décadas. Relacionado con estos factores e insumos, se destacan nuevos y remozados actores que, en conjunto con los productores y los eslabonamientos con la industria y los servicios, conforman y trabajan en forma de red (Bisang y Kosacoff, 2006). Como aporte a la descripción de este fenómeno, el objetivo de este trabajo es estudiar uno de esos protagonistas: los prestadores de servicios o contratistas. Se plantea como hipótesis que los cambios tecnológicos evidenciados en el agro fueron, en parte, canalizados hacia los productores por un actor (contratistas) que, especializado en la tenencia de un factor productivo (maquinaria), conjuga capacidad empresarial y financiera, necesidad por aplicar los cambios tecnológicos junto con conocimiento tácito, mayor posibilidad de diversificar el riesgo agropecuario y estrechas relaciones con el resto de los actores (dueños de la tierra, Centro de Servicios, etc.). A lo largo del trabajo se resume la interacción histórica entre los contratistas y la agricultura como una forma de caracterizar a estos empresarios y resaltar los aspectos que han influido en su expansión, convirtiéndolos en una peculiaridad de la agricultura argentina. Este repaso ofrece claros indicios sobre la hipótesis planteada -luego confirmados con información estadística- que, además, permite medir el peso de estos actores en la economía y su evolución reciente.