MIRADA ANATÓMICA DE LA VÍA OLFATORIA Y SU RELACIÓN CON EL TÁLAMO

El sistema olfatorio es aquel encargado de la recepción de estímulos sensitivos vinculados al olor de las sustancias. Su vía comienza en las células bipolares de “Schultze” en la mucosa olfatoria y finaliza en la corteza olfativa primaria, que abarca corteza piriforme, y a la corteza orbitofrontal....

Descripción completa

Guardado en:
Detalles Bibliográficos
Autores principales: Melisa S. González Abad, Juan A. Costa, Matías A. Perea, Gaston Tarantino
Formato: article
Lenguaje:EN
ES
Publicado: Asociación Argentina de Anatomía Clínica 2021
Materias:
R
Acceso en línea:https://doaj.org/article/27d57f367b434c21b891864b98467935
Etiquetas: Agregar Etiqueta
Sin Etiquetas, Sea el primero en etiquetar este registro!
Descripción
Sumario:El sistema olfatorio es aquel encargado de la recepción de estímulos sensitivos vinculados al olor de las sustancias. Su vía comienza en las células bipolares de “Schultze” en la mucosa olfatoria y finaliza en la corteza olfativa primaria, que abarca corteza piriforme, y a la corteza orbitofrontal. Las demás estructuras cerebrales olfativas incluyen la corteza entorrinal, el hipocampo, corteza parahipocampal, el tálamo, el hipotálamo, la corteza orbitofrontal, la corteza insular y su extensión hacia la región frontal lateral inferior. El tálamo es un núcleo encefálico que cumple una vital función de regulación sensitiva del organismo interviniendo en una gran cantidad de procesos mentales que dan forma a la manera de percibir y actuar en el entorno. Durante mucho tiempo se pensaba que el tracto olfatorio no guardaba relación con el tálamo, esto se debió al concepto del bulbo olfatorio como su propio equivalente talámico. Sin embargo, las aseveraciones más vigentes demuestran que el núcleo mediodorsal del tálamo presenta numerosas conexiones con las diferentes estructuras olfatorias que participan en la discriminacion y aprendizaje del olfato. Si bien estas interacciones implican una función clara del tálamo, no se trata de una proyección esencial para esta vía. El equivalente talámico, las interconexiones de las interneuronas granulares y periglomerulares del bulbo olfatorio acompañada de su conexión cortical son más que suficientes para el correcto funcionamiento de la vía olfatoria.