El poder militar chino: el dragón alza el vuelo
China es un actor geopolítico de talla universal. Sus dimensiones geopolíticas –físicas, económicas, humanas, sociopolíticas y militares– son abrumadoras. Pero, quizás, lo que impresiona y en cierta manera preocupa más es su impenetrabilidad. Referido al arte de la guerra se manifiesta...
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Formato: | article |
Lenguaje: | EN ES PT |
Publicado: |
Universidad de Sevilla
2016
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Acceso en línea: | https://doaj.org/article/2ee0bde311bd47fbac637297fcf149ea |
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Sumario: | China es un actor geopolítico de talla universal. Sus dimensiones geopolíticas –físicas, económicas, humanas, sociopolíticas y militares– son abrumadoras. Pero, quizás, lo que impresiona y en cierta manera preocupa más es su impenetrabilidad. Referido al arte de la guerra se manifiesta de forma clara en utilizar la “decepción” como su principal estratagema –uno de sus principios básicos enunciados por Sun Tzu–. No se busca, por lo tanto, el enfrentamiento de las capacidades militares, sino la pugna entre las maestrías intelectuales. Así, el poder militar chino, tradicionalmente postergado por el poder imperial, no fue capaz de resistir el encuentro con el industrializado occidente que lo sojuzga durante el llamado “siglo infame de humillación”. Y no ha sido sino a través de dos de las más cruentas guerras de la historia de la humanidad y de la revolución comunista como el dragón herido ha vuelto a recuperar el control de su propio destino. A lomos de su Ejército Popular de Liberación, campesino e iletrado, vuelve a sus orígenes para consolidar esa única e imperecedera Civilización-Estado. Un ejército del pueblo y para el pueblo que, como brazo armado del Partido Comunista Chino, sólo mira hacia el interior de su gran muralla; conocedor del poder del resto de dimensiones geopolíticas; y que sólo empieza a alzar la vista y emprender el vuelo de la mano del milagro económico de las últimas décadas. Un poder militar orgulloso y capaz, que quiere protagonizar, junto con su sociedad, esta vez sí, “el sueño de China, el sueño del pueblo”, del “desarrollo pacífico”. |
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