La historia de los Mokaná. Un capítulo de la historia en la región Caribe Colombiana

El presente artículo trata de la historia de los Mokaná un grupo étnico que habita en los departamentos del Atlántico y Bolívar. Su historia es el proceso de los pueblos americanos conquistados a sangre y fuego por los europeos y luego manipulados y traicionados por los criollos. En el proceso histó...

Descripción completa

Guardado en:
Detalles Bibliográficos
Autores principales: Álvaro Baquero Montoya, Ada de la Hoz Siegler
Formato: article
Lenguaje:ES
Publicado: Universidad del Norte 2011
Materias:
Acceso en línea:https://doaj.org/article/36ef6a450ff94567b27ca4c1fbbff52b
Etiquetas: Agregar Etiqueta
Sin Etiquetas, Sea el primero en etiquetar este registro!
Descripción
Sumario:El presente artículo trata de la historia de los Mokaná un grupo étnico que habita en los departamentos del Atlántico y Bolívar. Su historia es el proceso de los pueblos americanos conquistados a sangre y fuego por los europeos y luego manipulados y traicionados por los criollos. En el proceso histórico de la aculturación, o de unión o contacto de culturas, a la que fue sometida la etnia Mokaná, se realizó la fusión de los elementos etno-culturales y el surgimiento de nuevas proto-etnias que iniciaron el camino para la conformación definitiva de la etnia de los actuales Mokaná. Este contacto de elementos se manifiesta en algunos casos en forma de sincretismo o supervivencia de los diversos elementos culturales. Esto último es particularmente cierto para los descendientes de los Zenúes, Mokanaes y Kankuamos, que habitan actualmente en San Andrés de Sotavento (Sucre); Puerto Colombia, Malambo, Usiacuri, Baranoa y Tubará (Atlántico), y Antanquez (Cesar), respectivamente. Estos amerindios perdieron la lengua y buena parte de sus costumbres, pero conservan rasgos culturales originales de sus ancestros, que no difieren sustancialmente de las costumbres y creencias presentes en el campesinado de la región. Actualmente el grupo étnico ha sido despojado de sus tierras, su lengua y buena parte de su cultura, pero con la constitución de 1991, se abrieron nuevos espacios sociales para que varios de estos grupos étnicos reclamen la identidad amerindia y algo de justicia social, largamente negada por la etnia dominante.