Los niños de nadie. Trata de personas a ras de asfalto
Con especial orgullo, y con cierto tono triunfalista en buena parte de los países occidentales desde hace ya varias décadas, se comparte y celebra la abolición de la esclavitud. Se la deplora, critica, condena y rechaza desde todos los ámbitos, no sólo por ser una práctica aberrante en la que los s...
Guardado en:
Autor principal: | |
---|---|
Formato: | article |
Lenguaje: | EN ES |
Publicado: |
Universidad de San Buenaventura
2007
|
Materias: | |
Acceso en línea: | https://doaj.org/article/89834579a2334fbe839da9bde9430366 |
Etiquetas: |
Agregar Etiqueta
Sin Etiquetas, Sea el primero en etiquetar este registro!
|
Sumario: | Con especial orgullo, y con cierto tono triunfalista en buena parte de los países occidentales desde hace ya varias décadas, se comparte y celebra la abolición de la esclavitud. Se la deplora, critica, condena y rechaza desde todos los ámbitos, no sólo por ser una práctica aberrante en la que los seres humanos son tratados como mercancías, sino también porque se violentan, desconocen y pisotean principios universales como los derechos humanos, la dignidad y la libertad.
|
---|