Hannah Arendt: el totalitarismo y sus horrores (primera parte)

El estudio del totalitarismo como fenómeno histórico y social empezó con el surgimiento del fascismo en Italia y, un poco más tarde, los regímenes estalinista y hitleriano fueron su objeto. Si la meta de cualquier movimiento totalitario es la transformación de la realidad social, hay dos maneras de...

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Detalles Bibliográficos
Autores principales: Virginia Aguirre E., Mijail Malishev
Formato: article
Lenguaje:ES
Publicado: Universidad Autónoma del Estado de México 2011
Materias:
P
B
Acceso en línea:https://doaj.org/article/d450dbde0a0b4a929072e4fdcb9a4253
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Descripción
Sumario:El estudio del totalitarismo como fenómeno histórico y social empezó con el surgimiento del fascismo en Italia y, un poco más tarde, los regímenes estalinista y hitleriano fueron su objeto. Si la meta de cualquier movimiento totalitario es la transformación de la realidad social, hay dos maneras de alcanzarla: la conversión del ser humano en ceniza de Lager o creando “un nuevo tipo de hombre” por medio de la transformación de las relaciones sociales “zoológicas” en “verdaderamente humanas” o por la selección artificial de “razas superiores”. Es por esto que los regímenes totalitarios realizan un abuso monstruoso del poder, pero también generan la esperanza de que pueden cumplir las condiciones necesarias para la transformación moral, estética y física del hombre, la cual les sirve para justificar y legitimar las represalias contra los grupos que, según los ideólogos del totalitarismo, obstaculizan la realización de un futuro radiante.