Hallazgos anatomopatológicos definitivos en pacientes tiroidectomizados con diagnóstico preoperatorio de neoplasia folicular

Introducción: El hallazgo de una neoplasia folicular por PAAF, obliga a realizar una tiroidectomía parcial o total, para definir la naturaleza maligna o benigna definitiva de la lesión tiroidea. Junto a este diagnóstico preoperatorio se identifican finalmente con alta frecuencia lesiones histológica...

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Detalles Bibliográficos
Autores principales: Goñi E,Ignacio, Krsulovic R,Claudio, León R,Augusto, González D,Hernán, Solar,Antonieta, Campusano M,Claudia, Ruiz A,Catalina
Lenguaje:Spanish / Castilian
Publicado: Sociedad de Cirujanos de Chile 2012
Materias:
Acceso en línea:http://www.scielo.cl/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0718-40262012000200004
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Descripción
Sumario:Introducción: El hallazgo de una neoplasia folicular por PAAF, obliga a realizar una tiroidectomía parcial o total, para definir la naturaleza maligna o benigna definitiva de la lesión tiroidea. Junto a este diagnóstico preoperatorio se identifican finalmente con alta frecuencia lesiones histológicas adicionales. Objetivo: Conocer y describir los hallazgos anatomopatológicos definitivos que se encuentran en tiroidectomías por neoplasias foliculares diagnosticadas por PAAF. Materiales y Métodos: Revisión transversal de las biopsias definitivas de 133 pacientes sometidos a tiroidectomía total entre 2003 y 2009, que cumplieron los requisitos establecidos para evaluar la histología definitiva del nódulo puncionado y de la glándula tiroides completa. Resultados: En el 33,1% de los pacientes el diagnóstico definitivo del nódulo puncionado fue efectivamente una neoplasia folicular (adenoma en el 26,3% y cáncer en el 6,8%). El 51,9% correspondió a hiperplasia folicular y el 8,3% otro cáncer. La prevalencia de malignidad final en la glándula completa fue de un 29,3%. Conclusiones: Siendo la indicación de tiroidectomía en estos pacientes un tratamiento y procedimiento diagnóstico aceptado y necesario, se concluye que la alta prevalencia de lesiones malignas (29,3%) tanto en el nódulo puncionado como, adicionalmente, en el resto de la glándula, reforzaría la necesidad de este tratamiento quirúrgico.