Alto confort interior con mínimo consumo energético a partir de la implementación del estándar "Passivhaus" en Chile

El ahorro de energía es un tema muy de actualidad en Chile. En el sector de la construcción hay dos frentes divergentes: por un lado, el confort interior insuficiente y por otro, el alto consumo energético, ambos son producto de una edificación deficiente. En este artículo, se demuestra que en el ce...

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Detalles Bibliográficos
Autores principales: Hatt,T, Saelzer,G, Hempel,R, Gerber,A
Lenguaje:Spanish / Castilian
Publicado: Escuela de Construcción Civil, Pontificia Universidad Católica de Chile 2012
Materias:
Acceso en línea:http://www.scielo.cl/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0718-915X2012000200011
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Descripción
Sumario:El ahorro de energía es un tema muy de actualidad en Chile. En el sector de la construcción hay dos frentes divergentes: por un lado, el confort interior insuficiente y por otro, el alto consumo energético, ambos son producto de una edificación deficiente. En este artículo, se demuestra que en el centro-sur de Chile, se puede ahorrar aproximadamente un 80% de energía en climatización con construcciones que cumplen con el estándar energético, llamado estándar "Passivhaus". Junto con la posibilidad de bajar la demanda energética, se aumenta también el confort interior. A través de un estudio paramétrico, se analizaron las distintas configuraciones necesarias para cumplir con el estándar, en tres ciudades del centro-sur de Chile. La tecnología para construir casas "Passivhaus", tales como, una alta aislación térmica, las ventanas termo paneles Low-E con argón o, los sistemas de ventilación con recuperación de calor, ya son accesibles en el mercado nacional. Sin duda, las construcciones que logran el estándar "Passivhaus" tienen un costo de inversión inicial más alto que una construcción tradicional, pero, por otro lado, una casa "Passivhaus" tiene un costo de operación aproximadamente de un 80% más bajo que una vivienda tradicional. Con este ahorro en los costos de la operación, se recupera el costo inicial más alto, durante la vida útil de la construcción.