Impacto del primer “learning center” de cirugía mínimamente invasiva en Chile

Resumen Introducción: El entrenamiento estandarizado mediante simulación ha demostrado mejorar habilidades de residentes y cirujanos. Sin embargo, los centros de simulación que imparten programas validados son escasos y centralizados. Favorecer el acceso de la comunidad quirúrgica a estos programas...

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Detalles Bibliográficos
Autores principales: Inzunza A.,Martín, Quezada G.,José Luis, Jarry T.,Cristián, Torres G.,Alberto, Tejos S.,Rodrigo, Escalona V.,Gabriel, Abiuso B.,Valeria, Díaz F.,Gabriel, Riveros G.,Sergio, Achurra T.,Pablo, Barra M.,Marcelo, Jarufe C.,Nicolás, Varas C.,Julián
Lenguaje:Spanish / Castilian
Publicado: Sociedad de Cirujanos de Chile 2019
Materias:
Acceso en línea:http://www.scielo.cl/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S2452-45492019000500405
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Descripción
Sumario:Resumen Introducción: El entrenamiento estandarizado mediante simulación ha demostrado mejorar habilidades de residentes y cirujanos. Sin embargo, los centros de simulación que imparten programas validados son escasos y centralizados. Favorecer el acceso de la comunidad quirúrgica a estos programas constituye el desafío actual. Objetivo: Describir el primer “Learning Center” (LC) realizado durante el 90° Congreso Chileno de Cirugía, evaluar su impacto y percepción de los asistentes sobre simulación en cirugía mínimamente invasiva (CMI) en los programas de formación actual. Materiales y Método: Estudio de corte transversal. Se describieron las características del LC. Se aplicó una encuesta tipo Likert para evaluar impacto y percepción de los asistentes. Criterios de inclusión: completar ≥ 1 sesión de entrenamiento, exclusión: encuesta incompleta. Se aplicó estadística descriptiva y analítica no paramétrica. Resultados: LC se compuso de 10 estaciones de entrenamiento con distintos niveles de dificultad. Un equipo de 9 instructores monitorizaron y entregaron feedback efectivo a los asistentes. 84 asistentes contestaron la encuesta completa, 39% mujeres. La muestra se conformó por 41,6% residentes de cirugía general, 35,7% cirujanos, 17,9% internos de medicina, y 4,8% médicos generales. 85% manifestó acuerdo con el impacto positivo del LC como recurso educacional continuo durante el congreso, y la utilidad de la práctica simulada para el desarrollo de habilidades en CMI. No hubo diferencias significativas según sexo o nivel de formación. Conclusión: El primer LC se desarrolló con una amplia aceptación entre sus participantes, constituyendo un posible recurso permanente. El entrenamiento simulado en CMI parece ser un recurso aceptado y percibido como una necesidad por la comunidad quirúrgica nacional.